15 abr 2012

mil grullas de origami

Son un compendio de mil grullas de origami unidas por cuerdas. Una antigua leyenda japonesa promete que cualquiera que haga mil grullas de papel recibirá un deseo de parte de una grulla, tal como una larga vida o la recuperación de una enfermedad.

Sadako Sasaki, fue una joven que vivió cerca del puente Misasa en Hiroshima. El 6 de agosto de 1945 solo tenia 2 años cuando EEUU hizo estallar 2 bombas atómicas sobre la población civil. En el momento de la explosión estaba en su casa que se encontraba a 1,5 km de la zona cero de la deflagración. Nueve años después, era una niña fuerte atlética y con mucha alegría.Mientras corría una carrera comenzó a sentirse mal y cayo al suelo. Le fue diagnosticada leucemia, conocida como la enfermedad de la bomba A.
Su mejor amiga le recordó una vieja tradición sobre alguien que realizo mil grullas en forma de figuras de papel y gracias a ello los dioses le concedieron un deseo. Con sus propias manos, su mejor amiga le regalo la primera grulla que realizo en papel dorado y le dijo "aquí tienes tu primera grulla" Sadako tenia la esperanza de que los dioses le concedieran su deseo de volver a correr de nuevo. Al poco tiempo de empezar su tarea conoció a un niño que le quedaba muy poco tiempo de vida por la misma causa la leucemia, le animo a que hiciera lo mismo que ella con las grullas, pero el chico contesto "se que moriré esta noche"
Sadako pensó que no seria justo pedir la curación solo para ella y pidió que el esfuerzo que iba a hacer sirviera para traer paz y la curación a todas las victimas del mundo.
Con el papel de los botes medicinales y otros que iba encontrando llego a completar 644 grullas de papel. El avance de la enfermedad impidió que acabase de realizar la tarea , muriendo el 25 de octubre de 1955 a los 12 años de edad, tras 14 meses de ingreso en el hospital. Sus compañeros de escuela después de su fallecimiento llegaron a completar el numero aportando las grullas que faltaban por hacer hasta mil.
Los compañeros de escuela y amistades pensaron en dedicarle un monumento donde se representaría a Sadako sosteniendo una grulla dorada en su mano, también dedicada a todos los niños que murieron a causa de las dos bombas atómicas. En el parque de la paz de Hiroshima fue construida la estatua dedicada a Sadako en 1958, en la base esta escrito "este es nuestro grito, esta es nuestra plegaria: paz en el mundo". La historia fue tan impactante que trasendio los limites de Japón, convirtiéndose en un referente mundial de los movimientos pacifistas.